martes, 12 de marzo de 2013

Minha tristeza é uma alegria regada


Si de algo estoy segura en esta vida, es de que me conozco más de lo que alguien puede llegar a conocerse.
Soy una niña. Ya sé yo que soy una nena llorona y berrinchuda.
Por eso sé que cuando digo que nadie me tendrá nunca paciencia, es porque estoy cuasi segura de que será de esa manera.
Y al decir que me conozco no significa que esté justificándome (de hecho sé que casi siempre estoy mal a juicio de casi todo el mundo), soy la persona más imperfecta de todas.
También sé que no me gusta estar triste.
Es por eso, que al final de cuentas, lo que me sigue poniendo contenta es saber que siempre, sea como sea el día, es el único día. 
Y equis, no quiero dejar que se siga deslavando esa alegría con que he decidido vestirme desde que morí aquella vez.
La quiero de colores, a mi alegría, 
esos colores dulces que tanto que me gustan.

2 comentarios:

Dice un pajarito...

se ägradece cön el tambor deL corazón, con puro amör : .